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Tres tendencias alimentarias y nutricionales imprescindibles

Las últimas tendencias nutricionales son bastante fáciles de detectar. Muchas veces llegan a nuestros oídos nuevas tendencias alimentarias y dietéticas a través de amigos, parientes o redes sociales y, al poco tiempo, hay toda una línea nueva de productos alimenticios en las tiendas. En cuanto a las tendencias alimentarias, ¿cuáles pueden favorecer de verdad nuestro bienestar y cuáles son una moda pasajera?

Nuestra Directora Internacional Sénior de Educación y Formación Capacitación en Nutrición, Susan Bowerman, asistió a el encuentro anual de la Academia de Nutrición y Dietética en Atlanta, Georgia (EE.UU.), con el fin de conocer las últimas tendencias nutricionales para 2021. Te presentamos lo que averiguó.
Siempre resulta muy divertido e interesante asistir a este encuentro, no solo por su función didáctica, sino también porque se pueden ver y degustar cientos de nuevos productos alimenticios de diferentes proveedores en un mismo lugar. Estas son las tres tendencias principales que observé en el encuentro de este año y que no puedes perderte
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1. Aperitivos con proteínas

Una de las tendencias alimentarias y nutricionales más evidentes en el encuentro fueron las proteínas. Muchos de los proveedores con los que hablé estaban deseando contarme la cantidad de proteínas que tenían sus productos, ¡especialmente los aperitivos! Me puse muy contenta al ver esto, ya que significa que quizás estamos dejando atrás la idea de que los aperitivos son malos y cada vez estamos dejando más espacio en nuestro armario para aperitivos sanos y equilibrados.

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Los aperitivos tienen mala fama porque mucha gente piensa en ellos como un “picoteo” con escasas propiedades nutricionales. A menudo se piensa que los aperitivos son malos porque se consideran algo que tomamos por puro entretenimiento y no como medio para incrementar nuestra ingesta de vitaminas, minerales o proteínas.

Un aperitivo saludable que contenga proteínas puede cumplir una serie de importantes funciones. Puede ayudarte a mantener el hambre a raya entre las comidas, además de brindarte otra “oportunidad de comer” perfecta para incluir más nutrientes en el día.

2. Los productos sin gluten se han consolidado

Independientemente de si una persona necesita o no productos sin gluten, la tendencia de alimentos sin gluten puede ayudar a llevar una dieta más variada y con más nutrientes.

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Dado que la mayor fuente de gluten en la alimentación es el trigo, esta tendencia nos ofrece todo tipo de alternativas integrales interesantes como la quinoa, el trigo sarraceno, el mijo, el tef, el amaranto y los alimentos elaborados con estos ingredientes.
Es una gran forma de añadir variedad a la dieta, ya que cada producto vegetal ofrece su propio conjunto de nutrientes y, además, obtendrás un abanico más amplio de vitaminas, minerales y fitonutrientes.

Sin embargo, hay algo que merece la pena tener en cuenta: que un alimento no tenga gluten no significa necesariamente que sea bajo en calorías. Muchas personas han adoptado equivocadamente una vida sin gluten creyendo que así lograrían perder peso. Hace diez o quince años, estas personas podrían haber tenido razón, ya que había tan pocos productos sin gluten que evitarlo significaba, básicamente, evitar el trigo y todos los productos elaborados con este ingrediente. En aquel entonces, una dieta sin gluten consistía esencialmente en frutas, verduras, proteínas y pocos hidratos de carbono refinados; la seguía mucha gente.

3. Las bacterias “buenas”

Hay un gran interés por investigar el microbioma intestinal. Por lo que vi en el encuentro, es probable que cada vez se vean más productos diseñados para favorecer el desarrollo de estas bacterias “buenas”.

Los alimentos fermentados pueden ser la manera de introducir estas bacterias buenas en el sistema digestivo. La mayoría de las personas conoce los productos lácteos fermentados (como el yogur y el kéfir) como fuentes de estas bacterias.
También probé algo nuevo: un requesón cultivado (fermentado). Y había remolachas y zanahorias fermentadas envasadas.